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Buenas tardes.
La transición laboral hacia una economía más sostenible y equitativa debe garantizar la protección de los derechos laborales, especialmente para grupos históricamente marginados como las mujeres, personas LGBTQ+, personas con discapacidad y minorías étnicas. Se debe buscar establecer medidas específicas para asegurar una transición justa, inclusiva y respetuosa de los derechos humanos que permitan el desarrollo laboral y personal del trabajador.
La capacitación en género y diversidad debe ser un componente fundamental para un ambiente laboral justo y adecuado, en estas se deben abordar las inequidades y la discriminación que sufren a diario e históricamente las minorías en los lugares de trabajo.
en las capacitaciones para los trabajadores, un pilar debe ser la sensibilización, estos deben ser dirigidos a todos los escalones y puestos de la organización/empresa, con el fin de crear conciencia sobre las problemáticas sufridas, la violencia y la discriminación en cada rincón del ámbito laboral. También, la implementación de espacios seguros y de escucha, que permitan al trabajador mantener discusiones sobre las problemáticas y las vivencias diarias que le afectan para vivir y laburar en un ambiente seguro y libre.
En consecuencia y como segunda propuesta, considerando que la protección de los derechos fundamentales y laborales son la base para la creación de una sociedad justa en donde se garantiza la dignidad humana, permitiendo contribuir al bienestar colectivo y a la paz del país, en los ambientes laborales se deben garantizar los derechos, individuales y colectivos asegurando espacios seguros, salarios dignos y equitativos, condiciones laborales seguras, la distribución equitativa de los recursos y la oportunidad de crecimiento personal y laboral, a través de la implementación de políticas públicas que permitan la participación ciudadana en la vida económica, social y política de sus comunidades.